Elena Gómez, antigua alumna de nuestro colegio, graduada en Conservación y Restauración de Bienes Culturales por la Universidad Politécnica de Valencia (UPV) y con un máster en Patrimonio Cultural: Identificación, Análisis y Gestión (UPV), ha estado colaborando desde el pasado mes de noviembre en un interesante proyecto que se está llevando a cabo con el objetivo de poder recuperar las fotos dañadas durante la DANA del pasado 29 de octubre. Nos ha contado su historia y queremos compartirla con todos vosotros.
- ¿Cómo ha surgido la oportunidad de poder involucrarte en la recuperación de fotos de las víctimas de la DANA?
La Universitat de València subió un comunicado a sus redes sociales pidiendo a los afectados por la DANA que no se deshicieran de sus fotos, que la universidad se encargaría de restaurarlas. Al ver el comunicado me puse en contacto con mi tutora del Trabajo de Fin de Máster, ya que ella forma parte de la coordinación del proyecto, para saber si necesitaban restauradores y a los dos días empecé como voluntaria en el laboratorio del Museo de Historia Natural de la Universitat de València.
- ¿Tenías experiencia previa en restauración de imágenes o es algo que has aprendido para esta ocasión?
No tenia experiencia previa en restauración de materiales fotográficos ya que son estudios más especializados, pero sí que tenía experiencia en conservación de documento gráfico que es similar.
- ¿Cuál es el proceso que se sigue para poder restaurar las fotos?
Primero se realiza un registro de las familias y la cantidad aproximada de objetos que traen para después sacarlos de las bolsas en las que vienen y colocarlos en cajas para que se aireen, o bien, si tienen hongos van al congelador para frenar su proliferación. De momento se está realizando la fase de estabilización para más adelante poder realizar procesos de restauración, por lo que de momento se extraen las fotografías individualmente de los álbumes y se dejan secar totalmente.
¿Cuánto tiempo puede tardar la restauración de una sola imagen?
Se utilizan técnicas de secado tanto en horizontal como tendido para estabilizar las fotografías, luego se realizan baños de agua destilada y alcohol para eliminar el barro y los hongos en caso de que tengan. Una vez lavadas se dejan secar bajo peso entre papeles secantes y tejido no tejido para acelerar el secado, evitar que la emulsión se levante y que se comben. Luego se realiza la digitalización de estas a través de fotografía. En algunos casos no es posible restaurar el original por lo que se digitaliza para conservarlo. Entre los procesos de secado, lavado y segundo secado una imagen puede tardar una semana en estar restaurada completamente, pero estos procesos se realizan en tandas que permite aumentar el volumen de imágenes restauradas.
- ¿Cómo decidís qué fotos restaurar primero? ¿Se sigue algún criterio de prioridad?
En todos los laboratorios se sigue un protocolo en función de la gravedad del estado de conservación y de los procesos que necesiten para su restauración.
- ¿Hay alguna historia en particular que te haya conmovido mientras trabajabas en este proyecto?
No puedo dar datos personales de familias por temas de confidencialidad, pero sí que es cierto que trabajar para recuperar parte de la memoria de las familias afectadas conmueve. Al final es trabajar con historias familiares, que todos compartimos y empatizamos con ellas y poder devolver esas historias a sus propietarios te emociona.
